Obedientes oligarcas obstruyen oportunidades.
Obsecuentes oportunistas orbitan oscuros orbes. Oscilan, olfateando opulencia.
Ondean odio. Obviamente, originan odiseas.
Oprobiosos oficiales obesos ostentan orgullosamente.
Operan oro opaco; oxigena obscenas operaciones.
Ofrecen opiáceos (ochocientas onzas).
Omitamos olvidar oxidadas obras oficialistas.
Obispos oran. Omnipotente otorga orfandad; otros objetivos ocupan oídos.
Obsoletos opositores oprimidos.
Oigan, observen, opinen. Ocúpense, organícense. Opugnen objetivamente.
Muy bueno Andrés!